9 de noviembre de 2008

El funcionario

Todos sabéis que soy bombero, y todos sabéis que los bomberos somos funcionarios de alguna administración local. También sabemos todos que visto desde fuera el perfil del funcionario es aquel "trabajador" que se dedica a pasearse, a tomar café y desayunar cinco veces al día. Ese no es el caso de los bomberos.

Nosotros si tenemos una vida más holgada puesto que trabajamos un día 24 horas y descansamos luego cuatro días hasta la próxima guardia.

En uno de esos días, cuando trataba de echarme un ratito la siesta, escuché como la pobre de mi hermana, currante explotadísima de una empresa carroñera de servicios, decía: "pffff, no quiero irme a trabajar otra vez, que mal..." A lo que yo le contesté: "eso eso, tu vete a trabajar que me tienes que pagar el sueldo". No le quedó otra solución que echarse a reír debido a mi poca vergüenza de funcionario remolón. Seguro que pensó: "hay que ver este tío, yo aquí partiéndome el espinazo para pagar mis impuestos, para que él pueda comer, y el tio dormido..."

Una situación simpática que nos hizo pasar un buen rato antes de que ella se fuera al curro y yo a lo más profundo de los sueños.