Con cara de tonto

Aunque me parece a mi que el título de este post se queda un poco corto... Por fin acabaron los exámenes del primer cuatrimestre. La verdad que me he agobiado un poco sin necesidad, pero como soy un incansable, todo lo quiero sacar para delante y con el mejor resultado posible; aunque hoy parece que me he relajado un poco. Hoy el último examen ha asomado: Habilidades y Sistemática del Ejercicio, una asignatura que tenía medio aprobada y a la que no temía demasiado. Pues bien: no me he presentado... Anoche me acosté algo cansado, y la verdad que algo tarde. Puse mi despertador a las 07:15 como para cada mañana y cuando he he mirado el reloj eran las 9:17... Vaya cara de imbécil que se me ha quedado. Ni que decir tiene que el examen era a las 9 de la mañana y que tardo en llegar a la facultad más de tres cuartos de hora. Y lo gracioso no es que se haya estropeado el despertador del móvil, es que ha sonado porque la pantalla así lo reflejaba; pero yo no me he enterado de nada... Así que bueno, con cara de tonto me he despertado, con cara de tonto he vuelto a cerrar los ojos dando un par de resoplidos, y con cara de tonto me he vuelto a levantar. Al menos no me corre convocatoria y me podré presentar en junio...Y qué gracioso!! el otro día me reía porque un amigo mío se ponía tres despertadores a la vez y cada uno en un lado de la habitación. Si es que no puede ser... Y tú, ¿cómo te quedarías?