Lamentable espectáculo

Ayer tuve la ocasión de disfrutar desde el mismo tapete de un campo de fútbol, un partido reñido, bonito y a sus últimos coletazos, calentito... Bomberos de Sevilla contra Policía Nacional de Coria. Nada más comenzar el encuentro nos cogieron las espaldas y se adelantaron pronto en el marcador tras una bonita jugada entre el lateral y el delantero. Balón a las mallas y 1-0 para los policías. Poco a poco fuimos entrando en el partido y nuestras ocasiones se iban sucediendo con buenos disparos a puerta atajados por un correctísimo portero de nuestros contrincantes, todo hay que decirlo. Acabó la primera mitad y nada más reanudar, la tónica continuó siendo la misma. Bomberos acosando la meta rival hasta que el gol de merecido llegó tras una bonita jugada individual. 1-1.Aún por delante más de 20 minutos de partido. El partido se empezó a poner tenso, reñido, competido, bonito. Con intensidad, fútbol y calidad. Lo peor llegó instantes después cuando tras una buena ocasión de Bomberos, nos cogieron en una contra y nuestro defensa central derribó al delantero. Éste, lleno de furia le propinó una severa patada sin balón a nuestro central, y la tangana fue manifiesta... Tensión, voces y malos modos entre do cuerpos de seguridad... La verdad que todos perdimos los papeles, aunque más tarde supimos poner las mentes frías y hacer nombre de nuestras profesiones. El partido se sucedió tras ser expulsados nuestro defensa y su delantero... siguiente jugada, es derribado al borde del área uno de los nuestros tras una zancadilla fuera de lugar y la tensión creció en nuestro banquillo. Insultos de todo tipo a un colegiado que decidió, como se dice vulgarmente, pinchar la pelota y suspender el partido. Así que solo cabe reflexionar...