Señor Usain Bolt

No hay adjetivo en el diccionario del mundo para calificar lo que este hombre está haciendo con nuestra admiración. Récord tras récord este showman del tartán esta pulverizando todos los registros habido y probablemente por haber de la historia del atletismo, y más concretamente de los 100 metros lisos. Aquella distancia que desata pasiones entre los seguidores del deporte del sufrimiento. Ya lo hizo en Pekín el año pasado, donde los Juegos Olímpicos se pusieron ante sus pies y pulverizó el crono bajándolo a los 9, 69 segundos. Esta vez ha vuelto a hacerlo en un escaparate muy digno, como son los mundiales de atletismo que se están celebrando en Berlín, Alemania. Impresionante la ventaja que su potente corazón, ayudado de sus fuertes piernas, ha sacado a sus perseguidores. Y es que eso parecían, perseguidores y no contrincantes, más de un cuerpo de ventaja le ha sacado a hombres tan veloces como Asafa Powel. 9,58, otro golpe de autoridad de un hombre que no tiene final. ¿Será la potencia de Usain Bolt infinita? Si no habéis podido ver la final de los 100 metros, aquí os la dejo. Mucha tela...