30 de diciembre de 2010

Doce uvas

Llega el último día del año, y es precisamente ahora cuando todos hacemos memoria y nos ponemos a pensar en las cosas que nos han pasado. El año 2010 ha sido un año bonito, dulce y agrio a la vez en su recta final. La risa me ha invadido en la mayor parte de los días, aunque también las lágrimas y el desánimo han ensombrecido mis ojos en en más de una ocasión. Me paro y pienso que las cosas malas de la vida, esas que nos hacen sufrir, tenemos que aprender a desecharlas, y focalizar así nuestra atención en los pequeños rayos de luz que bañan el día a día. Mañana es el famoso día de las doce uvas y el país entero se paralizará para hacer algo todos juntos. ¿Te has fijado que es el único momento del año donde todas las personas están calladas a la vez? Mañana cuando tomes tus uvas una a una, piensa en estas palabras y escucha el silencio de tu espíritu: ama a los que te aman porque así será la única manera de poder amarte a ti mismo/a. Piensa en los momentos felices que has vivido compartiendo con gente de verdad; las veces que has ayudado y deseado a los demás; las veces que has obviado tus intereses personales para ponerte en lugar del que tienes al lado... Mañana es un día que la sociedad hemos hecho importante, y a mi me parece que la importancia está en la reflexión del momento. Cómete tus doce uvas de manera feliz y pide para el año nuevo lo que quieras, porque así empezarás con buen pie y con buenas ganas una nueva carrera. Pensad en la gente que os ama o amáis de verdad y dedicadle algunas de esas uvas. Yo espero estar en alguna de esas docenas... FELIZ 2011 A TODOS INFINITOS.

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